viernes, 6 de abril de 2012

EL PUZZLE

Cierto día, una pija "de las de verdad, de las de campeonato" llama a su novio al móvil, totalmente histérica y fuera de sí:
-¡Borja Mari, me he comprado un puzzle divino de la muerte, chachi molón, pero no lo consigo hacer! O sea, estoy completamente confusa. ¡Te lo juro, las piezas parecen todas iguales! ¡No sé que hacer...! ¡Ni siquiera encuentro las esquinas para empezar a hacerle…! ¡O sea, ayúdame, Borja Mari, por Snoopy!
El novio la deja que termina de chillar y luego habla:
-¡Espera, cálmate y escucha! ¿Qué foto o dibujo es el que tienes que hacer?
-Es un gallo rojo, moníííííííísimo, pero no consigo verlo, te lo juro.
-Vale, espérame. Voy para allá y lo hacemos juntos, ¿vale?
Y el chico se va para la casa de su novia. Cuando llega le pregunta:
-Bueno, ¿dónde está el puzzle?
-¡Está aquí, Borja Mari, mira qué chuli!
Silencio... Pasa un minuto.
Silencio... Pasan dos minutos más.
Se mantiene el silencio... Pasan otros tres minutos…
Finalmente, el novio rompe el silencio:
-Bien, vamos a hacer ésto: tú metes todos los "cornflakes" otra vez en la caja y no hablamos más de esto, ¿vale, cariño?

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