La siguiente anécdota me la contó un amigo, que le ocurrió a un vecino suyo (¿verdadera o falsa?):
El vecino, un joven albañil, tiene la mala suerte de que el día antes de su boda, se le cae un ladrillo en el miembro viril. Diagnóstico médico: rotura parcial del ligamento cruzado interior escrotal. Tratamiento: TUVIERON QUE ESCAYOLARSELA…
Con el disgusto, decide no contarle nada a su futurible esposa y pasa como puede el día más grande de su vida.
A todo esto, la novia, en la noche de bodas, le dice:
“Mira Pepe… estos labios que nadie nunca los han besado... son PARA TI” (él sonríe con mirada aprobadora de satisfacción).
Ella prosigue: “Pepe… estos pechos virginales que nadie los ha tocado… son PARA TI” (nueva sonrisa del “escayolao”).
Y ella sigue: “Pepe… este chichi que nadie lo ha visto jamás… es PARA TI”.
El vecino, un joven albañil, tiene la mala suerte de que el día antes de su boda, se le cae un ladrillo en el miembro viril. Diagnóstico médico: rotura parcial del ligamento cruzado interior escrotal. Tratamiento: TUVIERON QUE ESCAYOLARSELA…
Con el disgusto, decide no contarle nada a su futurible esposa y pasa como puede el día más grande de su vida.
A todo esto, la novia, en la noche de bodas, le dice:
“Mira Pepe… estos labios que nadie nunca los han besado... son PARA TI” (él sonríe con mirada aprobadora de satisfacción).
Ella prosigue: “Pepe… estos pechos virginales que nadie los ha tocado… son PARA TI” (nueva sonrisa del “escayolao”).
Y ella sigue: “Pepe… este chichi que nadie lo ha visto jamás… es PARA TI”.
El tipo ya no puede más… se baja los pantalones y los calzoncillos y MOSTRÁNDOLE EL MIEMBRO ESCAYOLADO le dice: “¡¡¡¡MIRA MARIAAAAAAAAA, SIN DESEMBALARRRRRRRRRRRRRRR!!!".
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